Una marca: el traslado de una belleza duradera
En muchísimas ocasiones nos sentimos abrumados por la espontaneidad y vertiginosa rapidez con lo que todo ocurre a nuestro alrededor. Como el bailarín que al saltar parece no poner apenas esfuerzo, generar belleza a través del diseño ha de hacerse de la manera más sencilla posible, sin perder ni los valores pilar ni nuestro Brand Purpose en el camino.
Pero lo sencillo, y más lo que emite tanta belleza pura, tanta esencia con tan poco, es la más difícil de las hazañas.
Si nos trasladamos al mundo de lanzar nuestra propia marca al mercado, nuestro proyecto, esa idea incubada desde el optimismo y la motivación personal. Ese pedazo de nosotros que hemos de narrar al mundo desde lo profundo, traducirlo a algo claro, evitando compararnos, minarnos, y perder el foco... es un camino enormemente complejo.
Por eso siempre aconsejo priorizar y buscar el sentido de la esencia.
Hacernos preguntas a nosotros mismos, esos porqués que nos harán profundizar y encontrar claridad a la hora de trasladar la belleza de nuestra idea tanto a nivel conceptual como a nivel visual y sensorial.
Mantén siempre la conexión con tu Brand Purpose, persevera, las marcas duraderas toman tiempo en enraizarse.
Hacernos preguntas a nosotros mismos, esos porqués que nos harán profundizar y encontrar claridad a la hora de trasladar la belleza de nuestra idea tanto a nivel conceptual como a nivel visual y sensorial.
Qué le aportamos tan bueno al mundo, qué hacemos incondicionalmente con todo el cariño y dedicación, en qué estamos dispuestos a invertir paciencia, dedicación. Con qué nos queremos comprometer.
Hoy en día es demasiado fácil sobreofrecer, hacer promesas en mil medios de forma simultánea, intentar vendernos, poseer el máximo de capacidades por abarcar y tomar control, pero solamente hemos de comprometernos a nuestra esencia, cono nosotros mismos.
Tenemos que aprender a observar el mundo de manera diferente, no tanto como un campo de batalla, sino como un campo de desafío y oportunidad. El mundo nos da un escenario para crear cosas, proyectos, productos, lo que sea, que despierten nuestra inquietud y orgullo, como para saber que sabremos buscar la energía e impulso de seguir adelante incluso en las etapas en las que parezca imposible.
Tenemos que aprender a observar el mundo de manera diferente, no tanto como un campo de batalla, sino como un campo de desafío y oportunidad.
Aunque vivamos en un mercado saturado, lleno de proyectos y gente en constante movimiento, hemos de verlo como un maravilloso campo de observación y aprendizaje, donde podemos encontrar oportunidades únicas. Esto no es un campo de batalla.
Algo tan normal como el agua, puede despertar curiosidad en nosotros si empezamos a hacernos preguntas. Observa más el mundo que te rodea, hazlo con cariño, con tiempo.
Pero a día de hoy todo parece tan etéreo, rápido, efímero, vacío. Todo va deprisa, casi sin sentimiento, cosa que personalmente me llena de tristeza. Dejamos de valorarnos por lo que hacemos, por lo que amamos hacer, a medirnos por lo que los demás juzgan que hemos de hacer, al ritmo que se marca, con la moda o tendencia que se supone se ha de seguir.
Y que te trague esa espiral es magnético y una perdición muy fácil en la que recaer una y otra vez.
Pero y si comenzamos tomando la vara por el otro extremo, partiendo del eje de orientación que nos lleve a comenzar por decirnos ... Qué puedo hacer yo por este mundo, qué aporto, qué problema resuelvo y algo en lo que tú puedas dedicar tu entera persona y poner toda tu predisposición, ganas y confianza.
Si habéis leído mi about, sabréis que en mi infancia no hacía más que repetir el porqué. Para todo y era porque mis padres y mi entorno me enseño a tener curiosidad por mi alrededor. A trastear sin miedo, a preguntar, a cuestionar, a no ver, sino desmenuzar todo y a la vez saber apreciar todo, sus formas, belleza, color, personalidad, estridencias.
Qué puedo hacer yo por este mundo, qué aporto, qué problema resuelvo y algo en lo que tú puedas dedicar tu entera persona
Os propongo un pequeño reto. En una hoja de papel, quiero que pongáis el nombre de vuestro proyecto y debajo, vuestro por qué. Aunque sean temporales. Y empecéis a formularos porqués derivados.
Porque gustaré, por qué la gente le interesara, por qué funcionará, por qué seré capaz de poner mi empeño en ello.
Intenta curiosear sobre el entorno, pero de manera constructiva, si hay cosas que observas de cómo se comporta la gente, gustos, tendencias, eventos a tu alrededor, sucesos para los que no tengas explicación; indaga y cuestiónate todo, relativiza.
Observa a las personas, observa el escenario, tu día a día, obsérvate a ti mismo, ten curiosidad por retarte y por buscar fuentes de motivación, fuentes de belleza.
Curiosea. Cuestiona.
Observa, identifica eso que te mueve, busca la manera de expresarlo desde dentro, despierta curiosidad en el resto.
Sé tú el que les haga buscarte. Despierta emoción, intriga, y sobre todo ten el sentimiento de hacer lo que haces porque amas lo que haces, porque deseas infundir tu pasión y sentimiento con servicios y productos. Eso se nota, lo notan.
Pasamos a observar, a interactuar de forma colectiva con sociedad y entorno, y cuando aprendemos a observar y trabajar en conjunto nos empoderamos más aún. Trabajamos de manera más eficiente, aprendemos de la observación y análisis, de la conciencia.
Los procesos creativos señores no son fáciles, pero han de llevar siempre en la recta a nuestro público, al cliente, a quien dirigimos el mensaje. Y ha de hacerse de manera activa. En mi caso, como diseñador, intento incluiros en el proceso en todo momento no solo para guiaros y daros herramientas, si no para trabajar desde una cercanía que me aporte un aprendizaje a mi misma. Me hace generar y pulir resultados para poder ofrecer mi propósito, en mi caso, el de crear marcas sostenibles en el tiempo, conceptos sostenibles, que aporten belleza y una función al mundo.
Entre una de mis fuentes de inspiración siempre os tengo a vosotros, a todo el proceso de interacción.
¿Aceptáis el desafío? A escribir porqués se ha dicho.
Curiosea. Cuestiona.
29 Julio - El BDD es el nuevo BBB.
Lo Bello, Duradero y Diferente que diferenciará radicalmente a tu marca.